La pintura electrostática es un recubrimiento en polvo de gran resistencia y

durabilidad, conformado por una mezcla homogénea de pequeñas partículas de

pigmentos, resinas y minerales. Este material se adhiere a las superficies mediante el

efecto de la electricidad estática, obteniendo un acabado uniforme y sellado

hermético.Posteriormente, se traslada a un horno de curado que funde las

partículas y las adhiere de forma permanente a la superficie dando un acabado

perfectamente liso.

Este tipo de terminación es la mejor opción para las piezas que se colocan en

ambientes exteriores y también para quienes busquen una terminación perfecta,

homogénea y duradera en sus productos.

Para su cuidado y mantenimiento recomendamos únicamente utilizar paño de

algodón humedecido con agua o productos neutros especiales para superficies

pintadas. No utilice paños abrasivos, disolventes, alcohol ni detergentes agresivos.

Seque bien la superficie en caso de estancamiento del agua.